Ubicado en el estado de Aguascalientes, el encantador Pueblo Mágico de Calvillo invita a los visitantes a sumergirse en su rica historia, vibrante cultura y exquisita gastronomía, especialmente sus célebres guayabas. Desde que uno se adentra en este pintoresco rincón, el suave aroma de las guayabas perfuma el aire, anunciando la presencia de uno de los mayores tesoros locales.

El nombramiento como Pueblo Mágico en 2012 no solo reconoció la belleza natural y arquitectónica de Calvillo, sino también su legado histórico y tradicional. Fundado en tierras donadas por Don José Calvillo, propietario de la Hacienda San Nicolás, el pueblo se erige sobre las raíces de una antigua congregación de indígenas nahuas de San José de Huejúcar, cuyo nombre significa “lugar de sauces”.

 

Calvillo ha dejado una huella significativa en la historia de México, siendo parte esencial de la Ruta de Miguel Hidalgo, considerado el padre de la nación, así como escenario clave en el conflicto de la guerra cristera. Hoy en día, el municipio se distingue como un generoso productor de guayabas, cuyos huertos, dulces y licores deleitan a los visitantes con los sabores auténticos de la región.

 

Para quienes exploran este Pueblo Mágico, hay una variedad de experiencias imperdibles que ofrecen una ventana a su encanto único. Entre ellas se encuentra la visita a la Plaza Principal, donde la majestuosidad de la Parroquia del Señor del Salitre, el Palacio Municipal y la Casa de Cultura cautivan a los visitantes con su arquitectura colonial.

El Museo Nacional de Pueblos Mágicos, inaugurado en 2019, es otro destino destacado que invita a sumergirse en la riqueza cultural e histórica de las localidades reconocidas con este distintivo. Aquí, los visitantes pueden explorar exposiciones que rescatan y preservan la identidad y tradiciones de Calvillo y otras comunidades mágicas de México.

Para los amantes de la naturaleza y la aventura, el Rancho Ecoturístico Ciénega de los Pinos ofrece un refugio sereno donde perderse entre paisajes extraordinarios. Senderismo, acampada y la contemplación de cielos estrellados son solo algunas de las experiencias que aguardan a quienes se aventuran en esta área natural, donde la abundancia de robles, encinos y pinos crea un escenario perfecto para conectar con la naturaleza.

 

Calvillo, con su historia arraigada, su arquitectura colonial y su exuberante entorno natural, ofrece una experiencia única que cautiva a los visitantes y los invita a descubrir los tesoros que hacen de este Pueblo Mágico un destino inolvidable en el corazón de México.